jueves, 30 de diciembre de 2010

REGULEQUE

                Por Alfonso Ríos Larrain

            A diferencia de Ximena Ossandón, ex Vicepresidenta de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI), no me quejo. Este blog fue creado el pasado 15 de noviembre y su única promoción ha sido “boca en boca” entre mis amistades y conocidos. Las 31 publicaciones han sido leídas por más de 3.000 personas, lo que hace un promedio cercano a 70 visitas diarias. El balance no es tan reguleque pero debemos mejorar. Todos tenemos visiones propias respecto a distintos temas y yo procuro explicitarlas cuando escribo. Les recuerdo que este es un espacio abierto a cualquiera opinión, que ellas no son alteradas ni reeditadas, que no hay más restricción que exponerlas con un lenguaje adecuado y respeto a los demás, y que pueden ser reproducidas total o parcialmente indicando la procedencia, título, fecha y nombre del autor. Gracias a todos por su interés, participación, consejos, críticas y comentarios.
            Volvamos a Ximena Ossandón. Desconozco su gestión de pocos meses al frente de la JUNJI, lo que me impide evaluarla como funcionaria. En todo caso -considerando el nivel de remuneraciones del sector público y las subjetividades que siempre habrá en estas materias- no me parece que un salario bruto de $ 3.730.000 mensuales pueda estimarse una “paga bastante reguleque” por dirigir un servicio que no es de primera división. Y, menos aún, con el onomatopéyico ¡Sniff! divulgado a través de un twitter que se convirtió en su lápida definitiva.
Lo que sí me consta es la honestidad y vocación de servidora pública de Ximena Ossandón, manifestadas en múltiples iniciativas benéficas que ha desempeñado con éxito, discreción y ad honores, compatibilizándolas con sus deberes de cónyuge, dueña de casa y madre de una numerosa prole. Entonces, ¿por qué este gimoteo y qué lo motivó? ¿Sería un sueldo que no retribuía debidamente la calidad de su gestión? No creo. Sus antecedentes dicen lo contrario. ¿Se trató de una reacción espontánea e imprudente que refleja inexperiencia política, como afirma su hermano Manuel José, alcalde de Puente Alto? Es posible, pero si el análisis se reduce a una simple indiscreción o “metida de pata”, no obtendremos ningún provecho de este episodio. Por lo tanto, escarbemos un poco más.
En general, el ser humano espera que sus actuaciones tengan el más amplio reconocimiento posible. Una forma de sensibilizar esta gratitud es autoinmolarse: “Estoy aquí (o hago lo que hago), postergando mi propio bienestar, mi propia vida y mi propio goce para servir a los demás, aunque la paga sea reguleque”. Pero esto no es más que una excusa para ocultar nuestro primer instinto natural y motor de sobrevivencia: el individualismo. Irracionalmente combatido por las corrientes colectivistas que -cual más, cual menos- promueven el “sacrificio” como valor per se y no como instrumento para alcanzar grados alternativos o superiores de felicidad personal, el individualismo es factor determinante en toda obra humana y asomó con fuerza y naturalidad en el twitter de Ximena. No la juzgo por eso. Por el contrario, aplaudo su autoestima. Lo que repruebo es que se valga del martirio para ganar comprensión, simpatías o popularidad.
Otra conclusión del incidente es la urgente necesidad de modernizar el Estado, una de las siete tareas que anuncia el gobierno para el próximo año. La misión es titánica y, sin dudas, la más difícil de cumplir porque es estructural, lesiona privilegios y exige productividad. Pero es, al mismo tiempo, el cometido más impostergable junto a la reforma educacional. Que el cargo de Vicepresidente de la JUNJI sea resuelto próximamente a través del sistema de Alta Dirección Pública es una buena señal y secuela positiva de un triste episodio ARL
¡FELIZ AÑO!